Siempre hay un antes y un después en nuestro camino. Mi vida no es la que era hace 3 años y medio. En este tiempo he tenido dos niñas preciosas, una cesárea, un parto con fórceps y dos embarazos que no tienen nada que ver el uno con el otro.
Ahora me preocupo de otras cosas, como es natural, y mis preparados, como es lógico, también han cambiado.
Hoy quiero compartir esta estupenda receta con vosotros. Es una crema especial para heridas, cortes, grietas, raspones o cicatrices. Incluso la podemos usar para la dermatitis del pañal y como crema de manos.
Es un bálsamo para tener a mano, con niños en la casa, nunca sabes cuando lo vas a necesitar.
La verdad es que yo la he hecho «por si las moscas» la necesito, sobre todo porque mi pequeña de 1 año no para quieta. También porque la quiero usar en alguna de mis cicatrices, acompañándola con el aceite de rosa mosqueta.
Crema para las cicatrices en vídeo
Ingredientes
- 1 parte de aceite macerado en caléndula.
- 1 parte de aceite macerado en hipérico.
- 1 parte de aceite macerado en consuelda.
- Cera de abeja, rallada.
- Unas gotas de vitamina E (opcional).
- Unas gotas de aceite esencial de lavanda o de caléndula (opcional).
La proporción de aceite y cera es: 1 vaso de aceite macerado por 1/4 de taza de cera. Si no os convence la textura final, podéis incluirle un poco más de cera o aceite, según si la queréis más espesa o más líquida.
Si queréis ver como hacer tu mismo una maceración en aceite vegetal, puedes leer mi artículo para hacer maceraciones u oleatos.
Siempre recomiendo echar un poco de vitamina E o aceite de germen de trigo, ya que mejora la calidad de la receta por todas sus propiedades para la piel y a la vez, lo usamos como conservante natural.
Me encanta la aromaterapia y pocas veces no añado algún aceite esencial en mis preparados. En este caso podemos añadirle aceite esencial de lavanda o caléndula, son suaves, aptos para niños, tienen grandes propiedades cicatrizantes y además el aceite esencial de lavanda es un gran antiséptico.
Esta receta está pensada para usarla en heridas y cicatrices, pero no en heridas infectadas o cortes complicados. Si queremos hacer una crema antiséptica entonces usaremos plantas como la equinácea, el sello de oro, la mirra o incluso la salvia.
Elaboración
- Echamos en un bol de cristal los aceites vegetales y la cera de abeja. Lo ponemos al baño María a fuego medio.
- Según se vaya derritiendo la cera, debemos mover con una cuchara de madera o similar.
- Una vez esté todo bien mezclado apartaremos del fuego.
- Añadimos la vitamina E y los aceites esenciales, mezclamos bien.
- Envasamos con cuidado y dejamos atemperar.
Guardaremos nuestra crema en un lugar seco y oscuro, lejos de las fuentes de calor. Nos durará intacta meses, incluso más tiempo.
Importante, es fundamental que todo el material, sobre todo el recipiente para nuestra crema, esté bien limpio y esterilizado, para que nuestra crema perfecta se conserve todo el tiempo posible.
Uso
Aplicar un poco de crema en la zona afectada. Previamente la zona debe estar limpia, desinfectada y seca.
Podemos aplicarnos la crema varias veces al día, si fuera necesario.
Aviso
El hipérico puede crear fotosensibilidad y en algunas personas puede crear manchas o quemaduras en la piel, por esto, una vez aplicada la crema no debemos exponernos al sol.
Una aclaración: No es lo mismo aplicarse la crema en la cara que en una zona que esté cubierta por ropa y lógicamente, no es igual si estamos en verano o es un día nublado de invierno.
Si os gusta haceros vuestro propios preparados, os recomiendo que conozcáis esta estupenda y práctica receta para hacer un spray antiséptico casero.