Hoy mi peque de 17 meses tiene mocos y algo de fiebre, asi que es él el que inspira este post.
Cuando eres naturópata tienes un montón de tratamientos que te salen solos cuando un adulto te dice “estoy acatarrado”, aceites esenciales, infusiones de plantas, extractos de más plantas. Pero cuando el afectado es un bebé que no sabe ni decirte qué síntomas tiene, si le duele el cuerpo, si sólo es congestión, si siente calor o frío, etc. es un poco más complicado. Aunque a la vez sencillo.
Siempre es bueno tener en cuenta que para ellos «menos es más«.
Os cuento los remedios y trucos que uso yo:
- Primero, mucho amor y cariño, estar con ellos el máximo tiempo posible abrazándoles, jugando a cosas tranquilas y respondiendo a todas sus necesidades. Es mágico, de pasar la tarde llorando y super irritables, consigues que sonrían y no dejen de darte besos.
- Lavados de nariz, preferiblemente con agua de mar. A nosotros la que mejor nos va y más nos gusta es el agua de Quinton nasal. Lo encontráis en farmacias y herbolarios. Lo uso casi a diario y 1 vez al día le hago una irrigación con la Isotonic (es más suave) y cuando está malito y congestionado echo mano de la Hipertonic, 2 veces al día. Si están las fosas nasales muy tapadas, le ayudo con un aspirador nasal (¡ojo! no la pera que hace vacío) Lo mínimo y sin forzar, siempre hidratando las fosas primero con suero o agua de mar. Si se puede, sólo ir limpiando lo que va saliendo con toallitas húmedas para no irritar. Hay quien prefiere el suero fisiológico, pero pensad en cuando os metéis en el mar, como se limpia la nariz por sí sola. La sal y los minerales desinfectan, limpian y evitan que la mucosidad se vaya hacia los oídos. Prometo un post sólo sobre las bondades del Agua de Quinton.
- Es bueno que duerman con humidificador, pero sin aceites esenciales hasta los 2 años, y mejor que haga la vaporización por frío o ionización, para evitar la proliferación de bacterias. Hay que limpiar bien el humidificador 1 ó 2 veces a la semana. Yo sumerjo los depósitos en agua caliente con zumo de limón.
- Ni que decir tiene que si es época de naranjas o mandarinas, durante unos días hay que abusar de ellas todo lo que se pueda. A nosotros en este catarro nos ha pillado época de uvas, depurativas, con mucho agua, muchos antioxidantes, fresquitas, etc.
Pues en el rato que estoy escribiendo este post, y eso que entramos ya en tarde-noche y la fiebre tiende a subir, mi peque no ha dejado de comerlas y la temperatura ha bajado casi por completo 🙂
«Que nuestro alimento sea nuestra medicina», aprovechad lo que te ofrece la naturaleza.