Si aplastas una hoja de eucalipto y respiras profundamente alcanzarás un estado mental puro, vivificante y comprenderás por qué su aceite esencial tiene tanta importancia en aromaterapia.
El eucalipto se ha utilizado desde el siglo XIII para tratar problemas respiratorios.
Es un árbol fuerte, con unas raíces bien desarrolladas, que crece rápidamente. Tiene una gran vitalidad y segrega aceites a la tierra para evitar que crezcan otras plantas a su alrededor.
El aceite de eucalipto, que se extrae de las hojas y ramitas del árbol, tiene un intenso aroma medicinal.
Propiedades y usos
Actúa como antiinflamatorio, antibiótico, antivírico, analgésico y diurético. Es el aceite esencial perfecto para todos los males de enero.
También activa los glóbulos rojos que suministran oxígeno a todas las células del cuerpo y se emplea para tratar dolores y lesiones musculares.
Es estupendo para conseguir una sensación de equilibrio, calmar los nervios y aumentar la concentración. Y además calma dolores de estómago y diarreas, es excelente para los niños y elimina gérmenes y malos olores.
Formas de uso
Quizás la mejor forma de utilizarlo es en inhalaciones, pero también resulta muy eficaz en baños, difusores, vaporizaciones y como aceite para masajes.
Resfriados infantiles
Esta fórmula se puede aplicar desde los 2 ó 3 años de edad. Es muy importante conocer las indicaciones de los aceites esenciales en niños. Muchos aromaterapeutas no usan el eucalipto en niños pequeños porque pueden ser un aceite irritante y provocar bronco-espasmos.
Ingredientes
- 10 gotas de aceite esencial de eucalipto.
- 10 gotas de aceites esencial de lavanda.
- 10 gotas de aceite esencial de árbol del té.
Elaboración
Mezcla todos los ingredientes y utilízalos de cualquiera de estas maneras:
- Pon 3 gotas del preparado en un difusor a la hora de acostar al niño. Mejor si el difusor es por ionización o ultrasonidos, no tienen que calentar el agua y así no crean gérmenes ni suben la temperatura de la habitación.
- Para aliviar una congestión fuerte durante la noche, pon 2 gotas del preparado en un paño de algodón y colócalo en el interior de la almohada.
- Echa 2 gotas del preparado en el agua del baño, esta vez mejor disuelto antes en vinagre de manzana, leche o alcohol de romero, para que se mezclen bien los aceites con el agua.
- Mezcla 3 gotas con 2 cucharaditas de aceite de almendras u otro aceite vegetal y da al niño un masaje en el pecho y espalda.
- En caso de fiebre, echa 2 gotas del preparado, mejor disuelto en vinagre , leche o alcohol de romero, en 1 litro de agua tibia. Humedece una esponja y baña con ella al niño cada 2 horas. Puedes volver a templar el agua pero sin dejarla hervir ni calentar mucho para que no se degraden los aceites.
Son tantas las utilidades del aceite de eucalipto y de la aromaterapia en general, que nos fascina este tema.
¡Feliz invierno!