Igual que limpiamos nuestra casa periódicamente, también debemos ayudar a limpiar nuestro organismo y esto se consigue con las monodietas. Una monodieta consiste en basar nuestra alimentación durante un tiempo determinado en un solo alimento.
Para seguir una monodieta, se ha de preparar al organismo tanto al entrar como al salir de ésta, sino podría darse estados de ansiedad o nerviosismo que podría alterar más a la persona en vez de conseguir el efecto contrario. Por ello se debe iniciar consumiendo fruta fresca variada y vegetales el primer día y solo fruta variada el segundo y en el tercero dejamos solo la fruta que forma parte de la monodieta y al salir comenzamos con un día de frutas variadas, el segundo incorporar verduras cocidas, el tercero introducir cereales y harinas y el cuarto se vuelve a tu alimentación diaria.
Tenemos que tener presente que realizar una monodieta ha de tener un fin muy concreto, que es el de limpiar el organismo, sea para evitar posibles enfermedades o alteraciones o porque la alimentación emocional y física no ha sido la correcta durante un tiempo o para dar energía al organismo y ayudar a que él mismo se cure.
Actualmente las monodietas también se utilizan para bajar peso, realmente no adelgazan sino que ayudan a eliminar toxinas del organismo, líquidos retenidos y mejoran los órganos de eliminación como el riñón, la piel y el intestino, además de aportar un aporte calórico menor que con la alimentación diaria.
Cuánto tiempo realizo la monodieta y cuántas comidas realizo
Si es por motivo de una limpieza con uno a tres días es suficiente, si padeces una enfermedad degenerativa o inflamatoria sería conveniente 7 días y en casos más graves 21 días siempre y cuando se tenga en cuenta la energía de la persona y la medicación.
Es preferible ingerir una menor cantidad y hacer mayor número de comidas para facilitar la digestión y la depuración, porque si se consume casi todo a la vez, lo único que vamos a sentir es pesadez y malestar.
Tipos de monodietas
Existen muchísimos tipos de monodietas, la de la naranja (mejor en invierno como mínimo 2kg diarios, comenzando con tres en la primera comida y luego aumentando), la de la fresa (unos 300g por comida), la de la piña, la de las cerezas (ingerir de dos a tres kg de cerezas maduras), la de la alcachofa, la de las uvas (al menos 2kg diarios con piel), etc.
Es muy importante que estos alimentos sean orgánicos, sin aditivos para no contrarrestar la limpieza y que sean de la época o estación.
Precaución
Si tomas medicación se ha de controlar por un especialista.