Me encanta la idea de poder recolectar nosotros mismos las plantas, frutos, flores silvestres y hacer preparados con ellos. Llevo muchos años haciéndolo y ya por fin tengo un lugar perfecto para recolectar plantas: en casa de mi abuela materna, en plena sierra de Gredos.
Tengo mucha suerte de poder disfrutar de esta casa, está en un lugar precioso y tenemos una parcela llena de plantas, frutales y un huerto estupendo.
Cada vez que miro al suelo, veo alguna planta medicinal o comestible que me sirve para hacer algún preparado o experimento y eso me encanta.
Estos últimos días que he tenido de descanso, me he dedicado a recolectar rosas con mis peques y mi pareja, ¡qué mejor que hacerlo en familia!
Las rosas las iban a podar para que los rosales siguieran echando rosas, así que decidí aprovecharlas.
Con las rosas podemos hacer un montón de recetas, tanto de cocina como de cosmética natural o preparados de fitoterapia.
Hoy quiero que descubráis cómo hacer mermelada de rosas. Tengo que deciros que os sorprenderá lo rica que está y lo fácil que es hacerla.
Estos ingredientes son los básicos para elaborar la receta, pero podéis hacer variaciones y adaptarla a vuestro gusto.
Podéis incluir unas cucharadas de agua de rosas, ¡ojo! no todas las aguas de rosas que venden son válidas para uso interno, tened esto en cuenta.
Mejor si lo habéis hecho vosotros en casa. Al incluirle agua de rosas, el olor y sabor se potenciará.
Yo intento no usar mucho azúcar, aunque sea una mermelada, pero la cantidad de azúcar en una receta estándar suele ser la misma cantidad del ingrediente principal (los pétalos), es decir, en este caso serían 500 gr. A mí me parece excesivo.
Si no queréis echar azúcar, cosa que me parece perfecto, hay diferentes alternativas, por ejemplo, podemos añadirle sirope de ágave o azúcar de coco, probad.
Os dejo esta receta de mermelada de calabaza y zanahoria para que veáis otra forma de hacer mermelada sin azúcar, para ver la receta, pincha aquí.
Otra opción es añadirle un poco de manzana para beneficiarme de su pectina y conseguir una textura de mermelada diferente, además de usar los azúcares de la manzana.
Algo muy importante es que las rosas deben estar libres de pesticidas y demás químicos nocivos, porque sino al elaborar la receta con ellos todos estos tóxicos nos lo comeremos.
¿Cuándo recoger nuestras rosas? El mejor momento es por la mañana hasta medio día. Escoge un día soleado, debemos evitar los días lluviosos o con cierta humedad. De esta forma los aromas estarán en su mejor momento.
Si queréis que quede todo con la misma textura, una vez haya pasado todo el proceso, podéis triturarlo con una batidora o robot de cocina. Yo lo prefiero así para que mis niñas se lo tomen bien, pero es cuestión de gustos.
Nuestra mermelada de pétalos de rosas nos durará varios meses en perfecto estado en la nevera.
Si lo queremos guardar en la alacena o despensa, entonces, os aconsejo que le añadáis a la receta más cantidad de azúcar y que al envasar en los frasquitos de vidrio los selléis bien. Descubre cómo en nuestro artículo sobre cómo hacer conservas caseras.
Esta mermelada de pétalos de rosas podemos usarla para acompañar tanto recetas saladas como dulces.
Yo la uso en las tostadas del desayuno. Pero combina perfectamente con quesos, tantos de origen animal como vegetal. También da un toque especial junto a verduras en especial en ensaladas.
Y por supuesto usarla en los postres es una delicia, podemos usarla como una mermelada frutal más.
La rosa tiene múltiples propiedades medicinales excelentes para cuidar de nuestra salud, tanto por dentro como por fuera, si queréis conocerlas os animo a que leáis nuestro artículo sobre los usos terapéuticos y cosméticos de la rosa.
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