Los alimentos son nuestros mejores aliados para mantenernos sanos y que mejor que usarlos para mejorar nuestras defensas.
En este post vamos a comprobar como podemos usar los beneficios de los escaramujos y arándanos a nuestro favor, ya que son muy ricos en vitamina C y antioxidantes entre otras muchas cosas. Por ejemplo una manera sencilla y estupenda para nuestro paladar es tomarlos en compota.
La receta de compota de manzana, arándanos y escaramujos es muy fácil de elaborar y además al añadirle especias como la canela o el jengibre nos aportará mayores beneficios un ej. nos aportará mas calor en invierno, nos ayuda a combatir contra el catarro y la gripe y encima nos ayuda a tener mejores digestiones.
Ingredientes
- 2 tazas de arándanos frescos.
- 1/3 de taza de escaramujos secos.
- 3 tazas de manzana pelada y cortada en taquitos.
- 2 cucharadas de jengibre caramelizado o confitado.
- 1 cucharadita de canela.
- Media cucharadita de nuez moscada.
- 1/4 de cucharadita de clavo de olor.
- 1 cucharada de zumo de limón recién exprimido.
- 1 taza de sidra de manzana (mejor si es natural).
- 1 taza de agua.
- Miel o azúcar moreno según nuestro gusto.
En mi caso he usado arándanos secos, son más fáciles de encontrar tanto en supermercados como eco-tiendas o herbolarios, pero lo ideal es hacerlo con arándanos frescos.
Referente a los escaramujos, es muy fácil conseguirlos secos en cualquier herbolario, eso sí, para que queden más blanditos os recomiendo que los dejéis en agua unas horas antes de que realicéis la receta.
Yo en mi plato no he añadido la sidra pero simplemente porque no tenía en casa. La sidra en esta receta es opcional pero le dará un gusto rico y original.
La compota se puede servir con un poco de nata recién batida, quedará riquísima.
Elaboración
En una olla echamos el agua, la sidra, el zumo de limón y las frutas y bayas, calentamos hasta que comience a hervir el agua. Cuando este hirviendo bajamos el fuego a fuego lento y lo dejamos así durante 20 minutos, removemos un poco con cuidado de que no pierda calor con una cuchara de madera.
Las frutas, la manzana, los arándanos y los escaramujos, deben quedar blanditas y podremos ver que la manzana suelta una pequeña cantidad de mucílagos (como una especie de gel).
Ahora añadimos el jengibre caramelizado, la canela, el clavo y la miel o el azúcar, panela o miel. Yo lo he triturado todo en un mortero y lo he dejado aparte para quien quiera echarse un poco. Removemos bien durante unos minutos y retiramos del fuego la compota. Y listo…
Podemos tomarlo caliente o a temperatura ambiente, si lo deseamos podemos añadir un poco de nata montada 🙂