Todos sabemos que el ejercicio es fundamental para estar sanos. Por mi experiencia en consulta, lo tengo claro, cada vez que animo a un paciente a que comience a realizar deporte, sobre todo pilates o yoga, comienza a venir menos a consulta y eso es porque cada vez se siente mejor 🙂
Hay muchos deportes que podemos practicar, pero los que más recomiendo son el pilates, el yoga o el taichi.
Yo he practicado los tres y creo que son los mejores para conseguir un equilibrio cuerpo-mente perfecto, pero como todo, depende de cada uno, pues cada persona es diferente y tiene unas necesidades especiales.
Hoy quiero hablaros sobre estas tres técnicas y por qué es tan importante animarnos a practicarlas.
¿En qué consisten?
Sobre ellos podría escribir muchísimo, pero aquí os dejo una línea donde se resume lo más importante sobre ellos.
El yoga
Se realizan posturas que buscan trabajar la flexibilidad y alcanzar el equilibrio físico y psíquico. Además se realizan respiraciones, relajaciones y meditaciones.
El pilates
Es un entrenamiento físico y mental que une el dinamismo y la fuerza muscular con el control mental y la respiración.
Desarrolla los músculos internos para mantener el equilibrio corporal y mejorar la postura.
El taichi
Se basa en movimientos basados en la Medicina Tradicional China que buscan el equilibrio corporal para prevenir, mantener y devolver la salud al cuerpo.
¿Qué beneficios tienen para nuestra salud?
- Relaja la mente, mejora nuestro ritmo respiratorio, facilitando la respiración.
- Reduce la tensión muscular y relaja el cuerpo.
- Mejora la circulación sanguínea.
- Aumenta la serotonina (la hormona de la felicidad), con lo cual aumenta la sensación de felicidad., produciendo bienestar.
- Disminuye el estrés, la ansiedad, la depresión e insomnio.
- Aumenta la concentración y la autoestima.
- Mejora el sistema vascular y óseo.
- Mejora la fuerza y aumenta la energía.
- Ayuda a mejorar la coordinación, facilitando el movimiento.
- Aumenta la movilidad. Reduciendo la rigidez articular y muscular. Ideal para trastornos como artrosis, artritis, etc…
- Ayuda a mantener la postura correcta.
- Desarrolla la conciencia corporal, el «autoconocimiento». Mientras se estiran diferentes músculos, nos concentramos en ellos y llegamos a conocer mejor nuestro cuerpo.
- Evita la sobretensión que, a veces, la mente ejerce sobre el cuerpo.
- Contribuye a evitar lesiones como tirones musculares. Facilita la práctica de actividades intensas como correr, esquiar, jugar al tenis, nadar o montar en bicicleta.
¿Dónde podemos practicarlo?
Ahora hay muchos opciones para practicar este tipo de deportes, vivamos donde vivamos, aunque vivamos en un pueblo pequeño, podemos acudir a clases, a un gimnasio, un polideportivo o hacerlo en casa.
Yo, por ejemplo, intento hacer un poco de yoga, cada mañana, en casa, incluso, con mis hijas al lado. Para motivarme tengo un buen ejemplo: mi amiga Berta, que lleva años haciendo pilates en casa.
Así que como veis hay muchas opciones, ya no podemos poner más escusas, es hora de ponernos manos a la obra y comenzar a cuidarnos 🙂
Para animaros, pensad que en solo unas semanas de práctica, comenzaréis a notar los beneficios y seréis mucho más ágiles, tranquilos y sanos.