Tengo que compartir con vosotros esta receta porque me tiene enamorada. La granola casera me encanta y estoy muy contenta de haberla probado.
Cuando era pequeña tomaba cereales en el desayuno pero nunca muesli, pues me parecía muy seco, no me terminaba de convencer. Desde hace tiempo quería probar a hacer granola casera para mi hija la mayor, ya que es una buena fuente de calcio y de omegas por el sésamo, el lino y los frutos secos que lleva, pero ahora soy yo la que disfruta desayunando.
La granola se puede personalizar al gusto y necesidades de cada uno, además se elabora de manera sencilla y en unos pocos minutos.
La receta que me ha servido de guía es del estupendo libro de «Mis recetas de cocina Anticáncer» de Odile Fernández, que os lo recomiendo totalmente.
Ingredientes
- 1 taza grande de copos de avena.
- 1/3 de taza de semillas de lino y sésamo recién trituras.
- 3 ó 4 cucharadas de frutas deshidratadas como pasas, arándanos, higos, etc.
- 2 ó 3 cucharadas de miel.
- 2 cucharadas de aceite de oliva virgen o aceite de girasol.
- Un poquito de canela (opcional).
Las recetas tradicionales llevan también:
- 3/4 de taza de nueces bien troceadas.
- 3/4 de taza de pipas de calabaza.
Os recomiendo que los alimentos que uséis sean ecológicos. Es importante que los frutos secos y las semillas que uséis no estén ya cocinadas por ej. que las pipas no estén tostadas ni fritas.
Lo ideal sería usar un buen aceite de oliva virgen pero si no tenemos también vale echar un poco de aceite de girasol.
La miel que uséis por favor fijaos en la procedencia, esto es importante porque están mezclando mieles de China que no son muy sanas que se diga. Además, cuanto menos tratada sea mejor, que tenga consistencia de miel, que no sea líquida como la típica de supermercado. Ojo, la miel no la pueden tomar niños menores de 1 año.
En la receta que yo uso no puedo echar frutos secos, a mi pesar, ya que mi peque les tiene un poco alergia, es una pena porque las nueces le aportan un montón de propiedades. Yo le incluyo arándanos porque son ricos en vitamina C y son muy antioxidantes, además están muy ricos. Y los higos porque son una buena fuente de calcio.
Como veis se puede variar la receta al gusto del consumidor, por ejemplo, yo en cuanto pueda le quiero añadir unas perlas de chocolate negro (sin leche) que seguro que le dan un toque riquísimo.
Elaboración
Echamos en un bol los copos de avena, las semillas de lino y sésamo trituradas, el aceite y las cucharadas de miel. Removemos bien. En este paso también echaríamos las pipas y los frutos secos.
En la bandeja del horno, ponemos un papel vegetal y extendemos nuestra mezcla bien.
Horneamos de 15 a 20 minutos, dependerá del horno, debe estar a unos 150ºC, el calor debe estar arriba y abajo. Tenemos que ir removiendo de vez en cuando para que toda la mezcla reciba el calor de manera homogénea.
Le dejaremos más o menos tiempo según nos guste de crujiente.
Cuando esté listo, lo sacamos del horno y lo dejamos enfriar.
Una vez frío añadimos las pasas, arándanos, higos, etc. bien cortados en cachitos. Le echamos en un bote de vidrio grande y lo guardaremos en un tarro de cristal.
Os recomiendo que lo guardéis en la alacena o en un lugar oscuro y seco.
Con estas cantidades os dará para bote grande. A mi me dura una semana aproximadamente, eso si somos dos personas las que lo desayunamos casi a diario.
La granola casera podemos comerla de muchas maneras no solo en el desayuno, por ej. en la merienda, como golosina sana, en el yogur, etc.
¡Espero que lo disfrutéis!