Hace tiempo que se conocía que cada vez hay mayores niveles de mercurio en los peces, en especial en el pescado azul.
España es el segundo consumidor de pescado del mundo por detrás de Japón, esto explica que muchos españoles tengan una alta concentración de mercurio en sangre.
Leyendo el boletín de la revista «Mi herbolario» he leído este noticia:
El contenido de mercurio en sangre de los españoles es entre 6 y 10 veces más alto que la media de Alemania y Estados Unidos, según los resultados preliminares del estudio sobre “Presencia y Vigilancia de Contaminantes Químicos”, realizado por el Instituto de Salud Carlos III. Según ha explicado la investigadora científica de este organismo y responsable del proyecto, Argelia Castaño, los principales contaminantes químicos que acumula el hombre son el mercurio, cadmio y plomo.
La investigación se ha efectuado entre 2008 y 2010 a más de 1.900 voluntarios, que representan a la población adulta española de entre 16 y 65 años de 12 áreas geográficas y a lo largo de cuatro periodos de muestreo en varios sectores laborales: servicios, económico, agrario, industrial y construcción, a los que se ha tomado muestras de sangre, orina y pelo.
De este modo, Castaño ha subrayado que los resultados son preliminares pero, en todo caso, revelan que el mercurio es un contaminante persistente y afecta de dos formas al ser humano, mediante las amalgamas dentales y a través del mercurio orgánico, que llega al cuerpo humano sobre todo a través de la ingesta de pescado, la mayor fuente de mercurio. Además, ha añadido que dosis altas de mercurio pueden afectar al feto en su desarrollo mental y provocar alteraciones nerviosas.
En cuanto a los niveles en la población española, ha precisado que son “semejantes a otros países que consumen mucho pescado, como los países mediterráneos y Japón” y superiores entre 6 y 10 veces a los de Alemania, Estados Unidos y Canadá. El mercurio, ha precisado Castaño, se acumula a lo largo de la vida en el organismo, por lo que los resultados señalan que los individuos más mayores presentan dosis más altas y que por ámbito geográfico, las zonas costeras españolas son las que tienen mayores concentraciones, especialmente Andalucía, Murcia, Comunidad Valenciana y Baleares.
Creo que es importante que estemos informados sobre estos estudios ya que en nuestra dieta diaria consumimos pescado.