El otro día os daba ideas para crear vuestras propias ensaladas. Hoy os paso una recetita de una nutritiva y fresca con ingredientes variados.
La quínoa tiene muy buenas propiedades y una buena carga de proteínas vegetales. Además alcaliniza el organismo, tan necesario para una buena salud.
En verano la quínoa también es un gran alimento; junto a los calabacines, los tomates, el maíz y el pepino fresco.
Con un toque de albahaca y cebolleta. Sólo conviene que quede bien suelta y es mejor quitar las semillas de tomate y pepino para que no se agüe demasiado.
La quínoa se cuece igual que el arroz. Primero se saltea con un poco de aceite, con cuidado de que no se queme, y luego se echa el agua hirviendo (2 medidas de agua por 1 de quinoa). Se deja hervir semi-tapado a fuego bajo hasta que el agua se absorba o evapore.
Con la quínoa y el maíz fríos, se mezclan todos los ingredientes con la ayuda de un tenedor y con cuidado de no romperlos. Déjalos reposar un rato antes de servir para que se impregnen los sabores.
Antes de servir, aliñar al gusto con sal, limón y aceite de oliva virgen extra.
Se puede servir amoldado o en ensaladera.
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